Hace ya como un par de semanas que no escribo ninguna entrada en mi blog, pero la verdad, no han sido un par de semanas muy agradables para mí.
Cierto es que en teoría han sido tranquilas, no ha pasado ningún acto que merezca ser destacado, ni he tenido problema alguno con nadie, pero a veces cuando el día a día parece tranquilo, y los problemas no te buscan, eres tú el que buscas a los problemas.
Como muestra os diré lo que ahora mismo me está pasando. Hoy he venido a Sevilla para, no se, despejarme o alegrarme, en teoría, el pretexto era venir a ver una película al cine y comer una hamburguesa, pero ya ni eso me sirve para que la tristeza no inunde mis pensamientos y que mis sentimientos se queden obsoletos con pena y absorto en un estado en el que parece que no tengo alma.
He hecho cosas que ansiaba realizar con éxito: he aprobado casi sin esfuerzo el curso actual, he logrado perder 10 kilos acumulados en invierno, en poco tiempo, hoy iba a ir invitado al Salón del Cómic de Málaga, con acreditación y todo…..inviable que con esto hace un par de semanas no estuviera loco de contento; pues no sólo no lo estoy, si no que ni siquiera he ido porque no me hacía ilusión, no parezco yo.
Estoy en el parking, en mi coche, con el ‘Breaking Your Own Heart’ de Kelly Clarkson de fondo, escribiendo estas líneas, porque desde hace un par de semanas estoy muy triste, muy apagado, casi sin fuerzas, con un pensamiento muy negativo, no logro ver la pequeña lucecita que me dé ánimos para saber que todo esto pasará, que el final del sombrío túnel está cerca, un túnel del que demasiada oscuridad he absorbido ya, y del que no encuentro un atisbo de valor ni energía positiva para recorrer más en busca de la ansiada luz. ¿Será que una vez que me introduje en dicho túnel, la entrada se desmoronó y me he quedado para siempre encerrado, sin posibilidad de salir de él?
No lo sé, no sé nada, ni soluciones ni nada por lo que merezca la pena seguir adelante y luchar por estar bien día tras día.Toda la culpa es mía. No negaré que el hecho de que nadie se preocupe por mí, el no tener un aliado, un apoyo en mi, ver que alguien se preocupa, sentirme querido, valorado… no me vendría bien, sería maravilloso y es algo que desde hace mucho tiempo no tengo, pero el no tener todo esto no es lo algo a lo que achacar por tener esta situación. Sólo puede ser un punto de apoyo para salir de esta, pero no lo tengo, esa es la realidad. ¿Y por qué no lo tengo? No lo sé, quizás no lo merezca, o quizás el destino es caprichoso y me esté poniendo a prueba tan rigurosamente, o quizás valgo lo suficiente para salir de esto solo… no lo sé. No sé nada.
Sólo sé que de noche me quedo horas en el balcón a veces sin pensamiento alguno, en blanco, otras me dan muchas ganas de llorar, desmotivado; pero siempre apenado por el hecho de notar que me estoy perdiendo muchas cosas, que estoy en una cárcel sin barrotes, no puedo escapar de ella, fugarme y encontrar la felicidad, en parte por que no se como salir, y en parte por que si saliera, no sabría que hacer una vez fuera.
No quiero seguir así, es lamentable, quiero ser feliz, lo necesito.
Sólo quiero ser feliz.